Del 11 al 20.
Discernimiento de un sueño.
Oración: ¿Qué camino debo seguir?
“Descubro los signos de la voluntad de Dios para mi vida a
través de los acontecimientos y de las personas que me rodean, afino mis oídos en
la escucha”
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Día 11.
Antes de dormir reviso la jornada en un momento de silencio y descubro cómo
Dios me habló a través de lo que viví.
Si puedo
definirlo como un mensaje, sería el resultado poco satisfactorio de mis
calificaciones estudiantiles. Así pues, supongo que sería la conciencia de mi
capacidad y que entonces soy suficiente para alcanzar metas más altas, o eso
creo. Sin embargo, como una comunicación más clara es el apoyo recibido de mis
padres y los concejos de auto-superación que me plantean
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Día 12.
Al levantarme ofrezco a Dios toda la jornada.
“Señor…
Te pido hoy que
todos los pasos que realice formen un sendero correcto, que las acciones que realice
sean un instrumento de progreso individual, las palabras que de mis labios
salgan no hieran, que por el contrario animen; y finalmente, que yo misma sea
un elemento e la felicidad de otros creando así la propia
Amén”
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Día 13.
Me pregunto con frecuencia ¿Qué hago, cómo lo hago y por qué lo hago?
Este día no
supuso mayor reto dado que aunque en ocasiones puedo ser impulsiva o imprudente
suelo ver las situaciones de forma imparcial para poder actuar de la forma más “adecuada2,
por así decirlo, en las respectivas situaciones. Así pues, hoy fue solo la
repetición de un día común pues lo que se me pidió es parte de mi
comportamiento.
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Día 14.
El día de hoy lo resumo en una consigna dedicada a Dios y a María.
“Mi señora, ayúdame
a sembrar y cosechar en mi la semilla del servicio, para que así, al igual que
tu lo hiciste, pueda ser instrumento positivo en los demás aprendiendo a ser
feliz con la alegría del otro, y así, cumplir un poco aquello que Dios nos
comunica por medio de los mandamientos”
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Día 15.
Invito a dos compañeros/as a hacer una experiencia de meditación de la palabra con la cita bíblica
Lucas 1, 26-38.
Meditar respecto
a eso no fue relativamente difícil ya que todos buscamos hacerlo. A nivel
personal, después de leer “Un Ángel anuncia el nacimiento de Jesús”, concluyo que
el amor que se profesa va más allá de los sentimientos, no solo es sinónimo de
querer, sino también de entrega y valentía siendo consciente que aunque las
posibilidades que muestre el futuro no sean alentadoras, una vez que se haya
tomado una decisión hay que luchar por ella.
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Día 16.
Reviso que cosas me estorban o no me dejan actuar con libertad.
A decir verdad,
suelo considerar que la libertad es la misma que no te deja actuar
completamente con independencia, pues al estar bajo la responsabilidad de tus
actos la libertad de los otros también se transforma en un opresor. No digo que
me agrade, pero, supongo, es lo correcto.
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Día 17.
Reflexiono con claridad, paz y constancia ¿Qué es lo que Dios ahora quiere de mí?
Bueno, creo que
esto fue particularmente difícil y dudo haber cumplido el objetivo, sin
embrago, lo único que puedo concluir es lo que considero y me han enseñado como
correcto, siendo en este momento, lograr un resultado satisfactorio con mis
estudios educando mi responsabilidad y perseverancia para el futuro.
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Día 18.
Hago un pare en el día para hacer un minuto de silencio por los jóvenes que no
le encuentran sentido a la vida
En este momento reflexioné
un poco sobre cuán fuerte puede ser una razón para eliminar todas las
esperanzas respecto al futuro que una persona puede llegar a tener, o bueno, la
visión que uno posee es bastante parcial dado que admitimos que la oportunidad
de vivir es absolutamente preciada.
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Día 19.
Leo y miro las noticias del día de hoy como un signo de llamado de Dios en mi
vida.
No sé como
hallar a Dios en este medio que con el pasar de los años ven en la violencia el
mejor método para ser visto o leído, ahora bien, si me pusiesen a elegir un
mensaje sería que me desarrollara lo más correctamente posible entre la
suciedad que denominamos sociedad, si soy lo suficientemente fuerte no me
corromperá, y no solo eso, seré capaz de ayudar a otros.
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Día 20.
Ofrezco los momentos difíciles de la jornada para crecer en serenidad.
A decir verdad,
considero que no se presentaron, sin embargo, decido acoger el mensaje de este
día ya que sé que la serenidad en las situaciones nos presenta soluciones que
somos incapaces de ver cuando nuestros sentidos son dominados por la ira.
Del 21 al 31.
Opción por un sueño.
Valentía: Sí… Hágase tu voluntad en mi vida.
“Me comprometo con mi vida y doy respuestas valientes a
aquello que el señor me pide”
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Día 21.
Escribo mis miedos y temores frente a una opción.
Creo que cuando
me enfrento a una decisión el temor más grande es el fracaso, ya que el tiempo
que has gastado en ello jamás será retribuido, y aunque puede servir como una
experiencia de crecimiento personal, no es menos cierto que un poco de
confianza se pierde cuando no logramos un objetivo.
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Día 22. Reflexiono
si hago la voluntad de Dios o mi voluntad.
Definitivamente
hago mi voluntad, total, n estoy segura de cuál es la de Dios en mi vida, así
que transformo mi existencia en lo que considero “Correcto”, suponiendo que Él
desease que esta fuese un orgullo para mí misma, sigo mis sueños para hacer de
mi algo valioso a mis ojos.
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Día 23. Hoy
renuncio a todo aquello que me produce inseguridad.
Imposible, ya
que aquello que aún me ata es el miedo, una persona no puede vivir sin temor,
pues es este mismo el que otorga conciencia de “acción-reacción”, no podemos simplemente
lanzarnos a un abismo sin protección porque olvidamos que no tenemos alas o
pensamos que el dolor que experimentaremos al impactar contra el suelo será mínimo.
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Día 24.
Reviso en que cosas soy veleta respecto a mis decisiones.
De hecho, considero
que en todas ya que son mis acciones las que marcan la dirección, es verdad que
difícilmente se puede elegir los vientos que ubiquen tu posición, sin embargo,
es infantil pensar que solo el entorno de desarrollo determina el resultado, es
cierto que influye en gran parte, pero eres tu quien decide sucumbir ante este
o seguir caminando para demostrar la fuerza propia de la victoria.
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Día 25.
Digo NO frente a las situaciones que estoy segura van contra mi o mis compañeras.
Considero que no
se presentaron dichos acontecimientos, aunque no estoy realmente consciente de
ello, ya que la respuesta de rechazo es automática. Así que, supongo, lo que se
sugirió para este día es solo otra acción común que realizo.
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Día 26.
Pienso en cuántas y cuáles excusas pongo a los planes que Dios tiene para mí.
Creo que la
única y principal escusa, y no la veo como tal, es que no pueda asegurar cuales
son los planes de Dios en mi vida, siendo de este modo, no estoy seguro de cuál
debería ser mi aptitud con respecto a ellos para así cumplirlos y complacerlo.
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Día 27.
Repito este jaculatoria durante el día “María, ayúdame a dar lo mejor de mí y a
ser generoso/a con Dios y con los hermanos”
Tuve esta frase
presente durante el día al haberla leído en la mañana, así pues, brindé mi
ayuda a aquellos que así me lo solicitaron teniendo en cuenta ofrecer esta
acción a Dios y a la virgen, sintiéndome, así, conforme conmigo misma.
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Día 28.
Me comprometo a luchar contra mi afán consumista y delimitar mis compras sólo a
lo que verdaderamente necesito.
Esto no supone
mayor reto dado que nunca he sentido el impulso consumista, pero creo que esto
es normal, “No se puede gastar mucho cuando no se tiene lo suficiente para
hacerlo”, así que considero, tengo una conciencia de cuán importante es el
dinero en esta sociedad y que por ello sé que no es “correcto” desperdiciarlo
en exceso.
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Día 29.
Como María doy un Sí a lo que he descubierto que el Señor me pide aunque todavía
las dudas me aseches.
Llegado el
momento, así lo haré, pues, como lo he dicho ya en varias ocasiones, aún no
estoy segura que es lo que Dios desea de mi o cuáles son sus planes para con mi
vida. Así entonces, continuo a la espera o trato de identificar qué es eso.
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Día 30.
Como María que dedica tiempo a los otros me desprendo por hoy de la tecnología y
dedico tiempo a escuchar a las personas.
Trato de hacer
esto, sin embargo, desde que me despierto utilizo la tecnología, dado que mi
despertador es el celular. Creo que las personas somos capaces de lograr un
equilibrio entre ambos factores, dado que uno sirve para el otro y viceversa.